Iglesia del Dulce Nombre de Jesús

En la calle Real podemos ver también la iglesia del Dulce Nombre de Jesús, edificio religioso construido a mediados del siglo XX. La importancia de este edificio está en la gran personalidad y obra de María Jesús Herruzo Martos.

La iglesia del Dulce Nombre de Jesús fue diseñada por Carlos Sáenz de Santamaría a mediados de la década de 1950, y es un espacio de estilo neobarroco que cuenta con tres naves y crucero cubierto con bóveda baída, adornadas con motivos geométricos.

En el conjunto del templo se integran; la Escuela Hogar, el Centro Infantil Juanita Méndez y la Residencia de las hermanas de la Comunidad de Obreras del Corazón de Jesús. El exterior del edificio es un conjunto de estilo neobarroco, articulado con ventanas y balcones que luce en la portada una hornacina situada por encima de la puerta, una imagen del Buen Pastor, realizada en Granada por Domingo Sánchez Mesa, escultor que también fue autor de los retablos e imágenes que decoran el interior del edificio.

En el crucero se cubre con una cúpula, con fajas geométricas pintadas de gris, y en las pechinas que sostienen la cúpula se pueden ver cuatro pinturas de temas religiosos.

El altar mayor se adorna con un gran retablo de madera dorada, de estilo neobarroco y el sagrario, de plata, tiene en la puerta una imagen del Buen Pastor y por debajo puede verse un pergamino en el que se recoge el nombramiento que se le hizo en 1957 a María Jesús Herruzo Martos, la madre fundadora del convento de “hija predilecta de la villa de Villanueva de Córdoba”.

En el crucero hay cuatro retablos; los que aparecen situados en los frentes se adornan con las imágenes de la Inmaculada a la izquierda y San José con el Niño a la derecha. A los pies de la misma se encuentra una lápida sepulcral bajo la que descansan los restos de la Hna Juanita Méndez Romero fallecida en 1990.

En los testeros del crucero podemos ver dos retablos semejantes presididos por los santos más venerados por la congregación. En el de la izquierda se encuentra el Sagrado Corazón de Jesús, flanqueado por San Luís Gonzaga y San Estanislao de Kostka, y en el retablo de la derecha se hallan San Ignacio de Loyola, situado entre San Francisco Javier y San Francisco de Borja, todos ellos pertenecientes a la Compañía de Jesús.

Si pasamos a la nave izquierda, veremos otras dos hornacinas con imágenes de San Cayetano y de Santa Teresa de Jesús y a los pies de la misma se encuentran, protegidas por una verja que las aísla del resto del templo, dos lápidas sepulcrales bajo las que descansan los restos de la fundadora del templo, María Jesús Herruzo, y los del cofundador Padre Pedro Castro.

En la nave derecha del templo, se encuentra colocada la urna que contiene la imagen de Cristo Yacente, que perteneció a la fundadora, y que fue tallado por Navas Parejo en la década de 1940, y la imagen de vestir de Nuestra Señora del Dulce Nombre, Virgen de la Paz, realizada en Sevilla en 1994 por el escultor Santiago Lara.

La iglesia del Dulce Nombre de Jesús es la sede de la Hermandad Sacramental y de Penitencia de Jesús Cautivo y Nuestra Señora del Dulce Nombre, «Virgen de la Paz», que desfila en procesión en la Semana Santa jarota, en la noche del Lunes Santo.